La intención del texto presente que presentamos a continuación no es la de realizar las actas de cada uno de los días de nuestro encuentro, sino la de presentar a modo de síntesis algunas de las ideas más importantes que se discutieron tanto en los grupos como en el plenario, destacando especialmente algunas propuestas nuevas que surgieron en el encuentro.

Después de unas orientaciones prácticas que sugería el P. Adalto Chitolina, como coordinador de nuestro 1er Encuentro, el P. Carlos Alberto Costa da Silva, Consejero General, abría nuestro encuentro con unas palabras alentadoras, en las que se nos decía que uno de los objetivos de este encuentro era ver lo que los jóvenes religiosos de latinoamerica pensamos sobre nuestro carisma y cómo lo estamos viviendo. Este encuentro también quiere ser promotor de otros encuentros en otros continentes. Partiendo por tanto de estas palabras, lo que transcribimos a continuación quiere ser precisamente el pensamiento y las vivencias de los jóvenes dehonianos de latinoamérica sobre nuestro carisma y sobre nuestra Congregación.

Estas páginas las escribimos con mucho entusiamo, porque queremos nuestro carisma y Congregación, sabiendo que estamos siendo escuchados por muchos cohermanos de los distintos países de nuestra congregación.

Los dos primeros días, 9 y 10 de Abril, estuvieron dedicados a la dimensión humano-psicológica, siendo el facilitador el Dr. Agostinho Busatto, especializado en psicología clínica, cuyo material de exposición aquí no vamos a presentar, al igual que el de los demás facilitadores, pues como hemos dicho más arriba, en este texto lo que presentaremos serán los puntos más importantes discutidos por nosotros los jóvenes así como alguna propuesta nueva que pudiera haber sido sugerida a lo largo de este encuentro.

La temática que abordó el Dr. Agostinho nos hizo reflexionar y constatar que tradicionalmente la formación y la vida religiosa , sumada a algunos condicionamientos culturales, ha enfatizado la formación intelectual produciendo cierta atrofia en la expresión de nuestros sentimientos. Esto también lo constatamos en nuestra Congregación y en nuestras comunidades.

Para tener unas relaciones más fraternas es preciso que en nuestras comunidades generemos nuevos espacios para comunicar nuestras experiencias vitales, sentimientos e intuiciones más profundas. Se hace necesario recrear nuestras relaciones fraternas de modo que podamos hacer realmente de nuestras comunidades “auténticos hogares de vida evangélica”. Somos conscientes que para que haya comunión en nuestras comunidades tenemos que comunicar más lo que pensamos, nuestros sentimientos, nuestros proyectos e ideas, etc. Este tema también volverá a surgir en los días sucesivos al estudiar y reflexionar sobre nuestro Carisma.

Los días siguientes del encuentro fueron dedicados propiamente a nuestro carisma, expresado en los tres lemas clásicos: “Ecce Venio”, “Sint Unum” y “Adveniat regnum tuum”, siendo esta parte a la que dedicaremos más espacio y atención. Los facilitadores desde unas nuevas claves teológicas, nos ayudaron a realizar una relectura vivencial del carisma.

“ECCE VENIO”

Los días, 11 y 12 de Abril, entramos con el tema de la oblación desde la doble perspectiva “Ecce Venio” y “Ecce ancilla”,

Tras la exposción del facilitador, P. Mariano Weizenmann, en grupos y después en plenario reflexionamos sobre las dos preguntas que nos presentó:

¿Qué es lo que nos fascina más en el Carisma Dehoniano?

Percibimos el carisma dehoniano muy actual en los tiempos en que vivimos. Nos sigue desafiando en el sentido que nos compromete seriamente con las necesidades y realidades injustas de nuestra sociedad. En este sentido nuestro carisma acentúa mucho la pastoral social y misionera. Sentimos el carisma como profundamente humano. Basta recordar los rasgos de acogida, hospitalidad y familiaridad a que estamos llamados a vivir en nuestras comunidades.y apostolado. La espiritualidad del corazón de Jesús nos remite a una vivencia profunda de la eucaristía y nos lleva a una pastoral de la misericordia y de la reconciliación en nuestra vida, comunidades y apostolado. Nos gusta también la flexibilidad en las opciones pastorales que se dan dentro de nuestro carisma, para responder al Hoy de Dios.

2. ¿Por qué vale la pena permanecer en la Congregación como religioso Dehoniano?

Esta pregunta tiene mucha relación con la anterior, pero su intención de ser es la de especificar más dentro de lo que nos fascina el carisma, aquéllo por lo que sigue valiendo la pena el permanecer en la congregación.

• Se destacó lo siguiente en los distintos grupos:
• Vale.la pena permanecer en la Congregación :
• Porque en el carisma encontramos la alegría de nuestro ser, nuestra felicidad y propia realización.
• Porque nos sentimos identificados con él y encontramos en él nuestro lugar en el mundo.
• Porque queremos ser generosos respondiendo con gratuidad y generosidad a la Gracia de Dios que hemos recibido en este Carisma
• Por los desafíos que nos plantea la vida religiosa hoy y más nuestro aporte como dehonianos.
• Porque estamos en búsqueda, juntos; no sólos, pues somos Congregación.
• Porque sentimos que el Carisma es una constante vocación del Espíritu y lo sentimos tan actual en estos tiempos.
• Por el testimonio de religiosos que se ve que aman el carisma y la congregación , que la quieren y que por ello siguen esforzándose por el bien de la Congregación.
• Por el estilo familiar, de apertura y acogida que muestran nuestras comunidades.
• Porque la oblación, la reparación, el Sint Unum y Venga tu Reino, son valores que nos atraen y queremos hacerlas presentes en nuestro mundo.
• Para nosotros el permanecer es una realidad dinámica, renovable, diariamente desde la Consagración.

Hemos de reconocer que nuestra vivencia de la oblación reparadora está antecedida y apoyada en el testimonio oblativo de muchas personas que son referentes importantes para nuestra generación : religiosos dehonianos (sacerdotes y hermanos) y laicos, vivos y difuntos. Todos ellos son ejemplo de santidad y de martirio que nos dan esperanza en nuestra búsqueda de una mayor fidelidad dinámica, tanto a nivel personal como comunitario.

Meditando sobre nuestra oblación pasiva hemos destacado algunas expresiones de la misma que ya vivimos: vivencia del voto de obediencia, muchas veces en un sentido vertical, con escaso diálogo. Aceptación de las situaciónes difíciles de la propia historia, fundamentalmente de los momentos dolorosos.

En cuanto nuestra oblación activa destacamos nuestra vivencia de entrega en el servicio apostólico, especialmente en situaciones que exigen sacrificio, incomodidades y opción por los más pobres, etc.

Considerando el camino oblativo de Jesús, lo ideal sería convertir toda oblación pasiva en activa. Para favorecer este paso necesitamos vivir los momentos personales difíciles e importante con presencia y afecto de los cohermanos, especialmente de los formadores y de los superiores. Por otra parte, en la vivencia de la obediencia requerimos afianzar la práctica del diálogo en la búsqueda de la voluntad de Dios.

“SINT UNUM”

Durante los días 13 y 15 de Abril, tratamos el tema del “Sint Unum”, siendo el P. Marcial Macaneiro, el facilitador de este tema. Entre estos dos días tomamos un día de descanso y paseo, el Domingo día 12 , para ir a Corupá, estar en nuestro seminario, compartir con la comunidad y los seminaristas de allí, y disfrutar en la tarde de las cascadas.

Entrando ya en el tema del “Sint Unum”, Marcial presentó una lectura sistemática del origen del “Sint Unum” como valor carismático. Tras esta exposición y considerando el sentir del grupo, cambió de metodología dando lugar a una mayor participación en el grupo de jóvenes religiosos. De esta manera en el diálogo en conjunto, surgió un itenerario con seis aspectos que mencionamos a continuación: inspiraciones carismáticas, espacios adquiridos, llamados emergentes, sentimientos, énfasis, y posibilidades concretas y decisiones. Estos aspectos en referencia a la vivencia del “Sint Unum”, mantuvieron al grupo en un cálido y entusiasmado diálogo, pues tocaban algo muy propio de cada uno de nosotros. La metodología de trabajo participativa, flexible, trasparente, nos ayudó a vivenciar el “Sint Unum”.

Respecto a la primera parte, INSPIRACIONES CARISMÁTICAS, que expuso el facilitador P. Marcial Macaneiro será publicado en otro momento. Los aspectos, espacios adquiridos, llamados emergentes, sentimientos, énfasis del “Sint Unum”, fueron tratados en grupos interprovinciales y el último aspecto ya que se refiere a posibilidades concretas y decisiones y en donde podrían surgir propuestas, fue tratado por las provincias, regiones y zonas por separado.

Los ESPACIOS AQUIRIDOS DEL “SINT UNUM”, se refieren a aquellos aspectos que ya están presente en nuestras provincias y comunidades. Se destacó lo siguiente:

• Reuniones y encuentros ya existentes:
• A nivel provincial, encuentros comunitarios, asambleas periódicas mensuales, semestrales o, por área, sector,. misiones dehonianas juveniles laicales, En algunas provincias encuentros de jóvenes religiosos,
• A nivel interprovincial, encuentros de Provinciales, de formadores latinoamericano, de la Pastoral Vocacional, de Justicia y Paz, y de la familia dehoniana
• Preparación para los votos perpétuos, algunas experiencias de noviciados abiertos a otros países.
• Las experiencias del Sint Unum que fueron relatadas, se pueden expresar como las “Bienaventuranzas del Sint Unum”: Tolerancia - Cuidado - Apoyo - Respeto - Compartir - Corresponsabilidad - Gratuidad - Confianza - Madurez - Transparencia - Donación Reconciliación - Solidaridad Encuentro Comprensión.

A nivel Provincial, cuidar más las relaciones con cohermanos de otras generaciones (antecesores), Mayor y mejor comunicación entre los religiosos, tener espacios comunitarios para orar y compartir en conjunto siendo capaces de compartir nuestros sentimientos e ideales, tener caja en común y ser capaces de compartir los bienes. Revisar nuestras obras y dar más importancia a las personas que a las obras. evitar el aislamiento de hermanos, que en la formación inicial se prepare para vivir en comunidad y el trabajo en equipo, que a la hora de elegir superiores se tenga en cuenta algunos criterios, como animador, servicial, etc y al mismo tiempo se definan con claridad cuáles son sus funciones, en nuestro trabajo pastoral ser capaces de planificar, actuar y evaluar en conjunto, que la responsabilidad de la obra y la toma de decisiones sobre la misma, sea realizada en conjunto, que los religiosos de las provincias sean formados para la gestión de las obras.

A nivel interprovincial, insertarnos en la dinámica de la Vida Religiosa Latinoamericana, mantener el encuentro de Jóvenes religiosos con votos perpetuos,

Los SENTIMIENTOS, En este apartado describimos los sentimientos que nosotros los jóvenes hemos tenido después de unos años de camino y vivencia en la congregación:

Dentro de la diversidad de experiencias destacamos algunos de los sentimientos que se manifestaron en algunos religiosos jóvenes de este encuentro:

Inseguridad surgida por sentirse sólo ante la obra o debido al peso de una responsabilidad importante y no sentirse acompañado.

Inquietud frente a algunas situaciones que se manifiesta de distintas maneras: malestar, insatisfación e incluso angustia por no sentirse valorizado ni tomado en cuenta en las decisiones importantes. La reiteración de este tipo de situaciones hace que algunos de los religiosos se sientan desvalorizados, protegidos o infantilizados al sentir que no se tiene confianza en su persona, o que no se le da las responsabilidades que ya podría asumir.

Sentimiento de desigualdad entre religiosos de probada experiencia y los jóvenes.

Sentimiento de responsabilidad, entusiasmo y protagonismo en varios de los jovenes a la hora de asumir responsabilidades y cargos en la provincia, región y por la propia congregación.

Sentimiento de esperanza, (primavera), expresado por las provincias Chilena y Venezolana, al ver que la provincias se van encaminando y los distintos proyectos y las vocaciones van tomando consistencia.

ÉNFASIS PARA LOGRAR UN “SINT UNUM”, Se refiere a algunas prioridades dadas para crecer en el “Sint Unum”, surgidas en el diálogo.

• Que el rol de los superiores priorice el diálogo y una comunicación fraterna y abierta.
• Se hizo mucho énfasis en la comunión y dentro de esta se insitió en: formar para la comunión en las comunidades, generar y gestionar la comunión, ser capaces de evaluar nuestras prácticas y funciones.
• Estimular a la participación al encuentro, al diálogo, al tomar decisiones y responsabilidades en conjunto.
• Crear espacios para compartir, salir juntos, comunicarnos y evitar el aislamiento.
• Dar siempre el primado a las personas tanto en la formación como en la organización de la Provincia. Las personas son más importantes que las estructuras.
• Fomentar el compartir los bienes como expresión de la pobreza dehoniana

Provincia de Chile (CH):

• Afianzar los logros en la vivencia del “Sint Unum”, que la provincia ha realizado en el último tiempo, llevándola a vivir una “verdadera primavera”: gratuidad y disponibilidad en los encuentros, trabajo en equipo.
• En cuanto a las posibilidades futuras del desarrollo de la Provincia queremos actuar en una doble dimensión:
• Por una parte, realizar un proceso de discernimiento donde participen todos, es decir, incluyendo a los más jóvenes. Este discernimiento lo queremos hacer principalmente acerca del estilo de vida religiosa que queremos llevar como dehonianos en Chile. A partir de este estilo de vida queremos discernir acerca de nuestro estilo de apostolado y de las obras. También queremos involucrarnos en un discernimiento, no pensando en que tenemos que tomar decisiones de inmediato, sino con el tiempo y si fuera necesario pedir la ayuda de expertos en este proceso.
• Por otra parte, mientras dure este proceso, continuaremos tratando de hacer posible lo que ya creemos , en aquellos lugares y responsabilidades que tenemos y estamos.
• Para favorecer la participación de los jóvenes vemos como posibilidad casi como disciplina, el encontrarnos una vez al año.

• En la Provincia Venezolana se dieron algunas sugerencias y una propuesta.
• Entre las sugerencias se citan:
• Potenciar en nuestras comunidades la comunicación, de manera que se pueda compartir nuestras vivecias de fe, nuestros problemas o situaciones difíciles que pudieramos pasar, nuestros deseos, proyectos, sentimientos e ideales.
• Procurar que decisiones importantes sean tomada a nivel comunitario y del mismo modo que la responsabilidad de las obras se lleven no individual, sino comunitariamente.
• Evitar que se improvise en la planificación en la Región.
• La Propuesta fue la siguiente: Trabajar estos temas dehonianos que hemos tenido en este encuentro a nivel de jóvenes religiosos de Venezuela.

• Provocar un encuentro de padres jóvenes para reflexionar sobre cuestiones pertinentes surgidas de este encuentro.
• Crear un espacio de convivencia y participación más intensa con los religiosos jóvenes.
• Posibilitar en el proceso formativo espacio para la participación.
• Trabajar las motivaciones para la participación en las actividades a nivel parroquial, regional, congregacional.
• Apoyar e incentivar la caja común
• Mejor acompañamiento de los religiosos dehonianos por parte del superior

• Realizar Encuentros y mantener comunicaciones.
• Que los próximos encuentros de jóvenes religiosos sean verdaderos espacios de participación y encuentro y no cursos de formación
• Ejercicio más trasparente de pobreza

• Que algunas de nuestras obras sean administradas con la ayuda de un consejo.
• Que haya un curso de administración dirigido para todos los religiosos en vista de la gestión de nuestras obras (ESIC? )
• Que nuestras comunidades sean realmente comunidades: cualidad y cantidad (al menos tres religiosos). Por tanto, se hace necesaria la revisión de obras.
• Que haya una caja común en cada comunidad
• Que se priorice a las personas ante que a las obras; que las transferencias sean vistas con antecedencia; que los consejeros regionales sean mediadores en el diálogo de los mienbros de la región con el superior; que el superior local sea valorizado en su función; que haya encuentros periódicos del superior regional con los jóvenes; que haya encuentro anual de religiosos jóvenes para compartir; que haya un formador de la RBM para acompañar a los estudiantes en teología en Taubaté; que la asamblea regional recoja sugerencias y sentimientos de los presentes, pues no está satisfaciendo razonablemente nuestras expectativas.

• Fomentar un sentimiento de pertenencia y de identificación con el grupo a través de encuentros informales y reflexiones por áreas/sectores sobre temas afines
• Trabajar interiormente para que los resentimientos no nos lleve a excluirnos a través de una práctica de oración personal y común y diálogo sincero y trasparente con los superiores.
• Fomentar la caja común.

• Mantener los Encuentros de jóvenes SCJ de hasta diez años de votos perpetuos, teniendo en cuenta momentos de formación permanente y nuevos proyectos y propuestas.
• Fomentar el espíritu fraterno en las comunidades facilitando las decisiones en común.
• Afianzar el trabajo en equipo.
• Valorizar la vida religiosa.
• Mejorar el uso de los medios de comunicación.
• Acentuar la formación para la gestión.
• Tener en cuenta la relación con la Iglesia local.
• Animar la planificación pastoral y comunitaria SCJ.
• Entre las posibilidades arriba mencionadas, creemos que los dos aspectos más relevantes en este momento son:
• Replantear el espacio de los SCJ jóvenes.
• Mejorar el uso de los medios de comunicación.

Los días 16 y 17 (éste último día sólo por la mañana) de abril, tratamos el tema de “Adveniat Regnum Tuum”, cuyo facilitador fue el P. Quinto Reggazzoni, director de la Revista de “Umbrales”. El P. Quinto desde un nuevo paradigma de la comunición, nos hizo reflexionar acerca de que es más importante en nuestro mundo actual el cómo anunciamos el Reino, más que el qué anunciamos. Teniendo en cuenta este paradigma de comunicación, además de algunas lecturas del Reino de Dios en el P. Dehon, por grupos internacionales se reflexionó sobre lo significa para nosotros “Adveniat Regnum Tuum”. La síntesis que presentamos queda recogida en los términos de comunicación usados en el nuevo paradigma de comunicación que nos presentó el P. Quinto.

CAPACITARSE

Se dió importancia a la Formación en distintos aspectos: formación específica en los campos de trabajo que vamos asumiendo, capacitación de la gestión de nuestras obras.

PLANIFICAR

Planificar en todos los niveles de nuestra vida y apostolado , para tratar de evitar la improvisación..Para ello es necesario utilizar: Proyecto de vida personal y comunitario, planificación en equipo, proyecto apostólico provincial, proyecto general “nosotros congregación”, y una planificación dialogada en la conformación de las comunidades.

EJECUTAR

Hacer más eficiente nuestras comisiones de animación y la gestión de nuestras obras.

EVALUAR

Evaluar los distintos proyectos en todos los niveles.

IDENTIDAD

Nuestra identidad: “Unidos a la oblación reparadora de Cristo al Padre por los hombres” tenemos que hacerla significativa en nuestro mundo.

CULTURA

La cultura dehoniana es nuestro estilo de vida expresado en el carisma, sintetizado en los tres lemas que hemos tratado: Ecce Venio, Sint Unum y Adveniat regnum tuum. Podríamos decir que la cultura dehoniana es la cultura del Corazón, en el sentido que hablar del Reino es hablar del Corazón de Jesús.

COMUNICACIÓN

• El Reino de Dios tenemos que comunicarlo con nuestro testimonio, con un estilo de vida coherente que se expresa en las siguientes Pastorales:
• Pastoral de la inclusión que se basa en la apertura, acogida y escucha.
• Pastoral de la reconciliación y la misericordia que es estar atentos a los clamores de los excluidos.
• Pastoral de frontera, opción por los excluidos.
• Pastoral eucarística.
• Pastoral reparadora solidaria.

Para que nuestro “Adveniat Regnum Tuum” sea realmente anuncio del Reino, es fundamental que nuestra “imagen” sea coherente. Con esto queremos decir que nuestro estilo de vida religiosa, nuestras opciones y acentuaciones pastorales e incluso lo más profundo de nuestra espiritualidad sea coherente con lo que la gente, el pueblo, percibe al relacionarse con nosotros. En nuestras comunidades religiosos tenemos la misión de ser iconos del Reino de Dios y anticiparlo.

Nosotros queremos identificarnos, al igual que P. Dehon, con “Ya no soy yo, es Cristo quien vive en mí...” (Gál 2,20)

Las pastorales que tratamos en el apartado anterior de la comunicación, las tratamos más ampliamente por grupos de provincia por separado:

Región de Marañon (MAR) y Misión de Mato Grosso

• En la pastoral eucarística se propuso trabajar más la dimensión personal y comunitaria en el actuar. Hacer acontecer en el día a día aquello que celebramos mediante la acogida, escucha, etc. Se pretende que la Eucaristía sea una celebración de la vida, fuente imperadora de la implementación del Reino.
• En la pastoral reparadora, incentivar la articulación de la comisión de “Justicia y Paz”, con sectores eclesiales y de la sociedad.
• La acogida creando espacio para el diálogo en la comunión fraterna y en el sacramento de la Penitencia.
• Apoyar los movimientos de base, populares, asociaciones de moradores, etc.
• Asistencia a los enfermos.

• Vemos la necesidad de atender a realidades nuevas:
• Pastoral de la cultura con jóvenes universitarios.
• Ofrecimiento de espacios con anuncio Kerigmático, donde se acentúe un acercamiento afectivo antes que intelectual al misterio de Cristo y de la iglesia y que provoque una disposición mayor para la conversión.
• En cuanto a la pastoral social:
• Cambio de estilo de trabajo,
• Que esta dimensión esté presente en todas las obras,
• Atención a víctimas de la desocupación, deprimidos, etc...
• Comprometer más a la comunidad cristiana local.
• Atención a los adolescentes y jóvenes frente a su desmotivación para estudio, etc...

• En la pastoral de la acogida:
• Preocupación por la inclusión de la persona
• Aceptar al otro tal como es. No encuadrarlo en esquemas preestablecidos.
• Prontitud para servir a las personas e ir al encuentro de las necesidades del otro
• Acoger a los hermanos considerados “difíciles” con quien nadie quiere convivir.
• Priorizar la persona y no las obras
• Preocuparse del auto cuidado, de la salud física y espiritual, para no ser más tarde un “religioso problema”
• Tener tiempo para gastar con otro, sabiendo que nunca se está “perdiendo tiempo”
• Alegrarse con el éxito del otro, entristecerse con su fracaso y tener compasión.
• En todo tener una actitud de misericordia.
• En la pastoral de la misericordia:
• Vivir la misericordia internamente para dar testimonio
• Vivir intensamente el sacramento de la reconciliación.
• Inquietud delante de las miserias y flaquezas humanas
• Tener cierta empatía en la relación com el otro.
• En la pastoral de frontera:
• Incentivar la “pastoral de rescate”
• Cuestionar siempre como estamos viviendo nuestra pobreza evangélica
• No tener ideas tímidas, ser capaces de abrir campos nuevos como (CDC, facultad dehoniana, misiones, ESIC, Facenda Senhor Jesus, etc..Ser capaces de soportar las críticas delante de eso

• En la pastoral de la acogida:
• Despojarnos de los preconceptos
• Prontitud y disponibilidad para acoger a los hermanos
• Estar más junto al pueblo, estar presente, visitar, evitar el uso del auto e ir a pie si es posible.
• En la pastoral de la frontera:
• Actitud de acogida a los excluidos
• Valorizar nuestros vocacionados.
• Misericordia con los hermanos que se equivocan, y con los que nos dejaron.
• Atención a los cohermanos en dificultades: ser prójimos
• Cultivar el diálogo, compartir la vida y los bienes , los deseos y desafios entre nosotros mismos.
• Preparar al pueblo para el sacramento de la confesión.

• En la Provincia Chilena estamos viviendo estas acentuaciones pastorales con prácticas y experiencias concretas, pero nos falta dar más cuerpo y consistencia a lo que hacemos mediante opciones y definiciones más operativas.
• Pastoral de la acogida: Nos proponemos que en la reunión de párrocos y vicarios se profundice la nueva conformación de la familia, para mantener una actitud de acogida e inclusión en nuestra pastoral.
• Pastoral de la inclusión: queremos ampliar nuestra opción por los marginados a una opción explícita por los excluidos que esté abierta a las nuevas realidades de exclusión, como son los drogadictos, los sin casa, los marginados afectivamente, etc. Queremos estar atentos a la diversidad y complejidad, es decir, atentos al Hoy de Dios.

• En la pastoral de acogida:
• Salir al encuentro de los pobres, necesitados.
• Gratuidad en nuestras casas
• Preocupación social en la acogida
• Acogida en cuanto a perder el tiempo y estar disponible para el otro
• Escucha de los clamores del necesitado
• En la pastoral de la Misericordia:
• Comprensión y perdonar al cohermano
• Compadecerse de los problemas del otro
• Atención a los necesitados, enfermos.
• Alentar más que criticar al hermano
• Crear comunidades fraternas
• Cuidar el sacramento de la reconciliación
• En la pastoral de fronteras:
• En nuestra pastoral estamos insertos en situaciones de fronteras
• Procurar una pastoral más de promoción quede asistencialismo.
• En este apartado hubo una propuesta para revisar nuestras estructuras comunitarias que a veces nos impiden una mayor inserción en las realidades de frontera.
• El encuentro terminó con un discurso alentador y entusiasta del P. Virginio, quien nos presentó la historia de la Congregación durante estos 125 años., desde las líneas de acción que ha inspirado a la Congregación. Al final del diálogo con él nos animaba a profundizar nuestro Carisma, pues es tan rico que no puede quedarse encerrado y a cuidar la comunión en todos los niveles, comunitario, provincial, congregacional, para superar individualismos, pues son éstos los que atentan contra la vida religiosa.